Este gran lienzo de playa (la de Abatilles en Arcachón) es la ocasión para la artista de pintar toda una perspectiva de bañistas, sombrillas y carpas de playa con, resaltado en primer plano enmarcando los tres lados de la escena, la mitad de una gran sombrilla roja en la parte izquierda del lienzo y dos grandes bañistas: en la parte inferior del lienzo, una mujer tumbada sobre la espalda, frente a nosotros con un traje de baño amarillo, con los brazos levantados hacia atrás, y en la parte derecha del lienzo, un hombre de pie visto de espaldas, secándose con una toalla sobre la nuca.
Este lienzo de tendencia cubista acumula el uso de patrones geométricos tanto en el tratamiento de los cuerpos como en el de los materiales de playa. La artista yuxtapone cambios de escala, multiplica las zonas de sombra y de luz y crea perspectivas en diagonal, reforzadas por colores mucho más cálidos en primer plano.
La originalidad de la puesta en escena, la distribución de los cuerpos que desbordan o que chocan con los límites del lienzo manifiesta un estilo pictórico típico de la artista en los años 50.